por José Vicente Haro García
Algunos analistas atribuyen la situación de Venezuela a que no tenemos Ciudadanos,
no tenemos ciudadanía. La crisis de la sociedad venezolana y del Estado fallido
que tenemos actualmente pudiera contribuir, junto con otros elementos, a concluir
que hemos llegado al presente en estas circunstancias, porque en efecto no
tenemos Ciudadanos.
Sin Embargo, me permito, en el ejercicio de mi libertad de expresión y
pensamiento, apuntar que tal vez la
conclusión no deba ser tan radical o absoluta. Es cierto, tenemos millones de
personas habitantes de un territorio que formó hace más de 200 años una Nación
llamada Venezuela, con un Estado fallido en la actualidad, a causa de lo que
todos sabemos y conocemos ha sucedido en nuestro país especialmente en los
últimos 18 años. Yo acotaría: tenemos millones de personas, pero pocos
Ciudadanos en comparación con nuestra población y con lo que se requiere para rescatar
el país, la sociedad venezolana, la democracia de la Nación y restituir un Estado
donde impere el Estado Constitucional para beneficio de todos los venezolanos.
Es cierto que la gran mayoría de los habitantes de Venezuela ya no
obran como Ciudadanos, ya no actúan con base en los valores y principios que
determinan la ciudadanía, tales como: La Libertad, la Responsabilidad, el Compromiso,
la Ética, la Honestidad, el Respeto, la Tolerancia, la Comprensión, la Solidaridad,
la Igualdad, la No Discriminación, la Educación, el Trabajo, el Esfuerzo, la Constancia,
la Meritocracia, la No violencia, la Equidad, la Justicia, la Participación, la
Democracia y el Pluralismo, entre otros. Esta es lamentablemente la realidad de
la sociedad venezolana y sobre esto sobran los estudios y referencias.
La mayoría de los habitantes de Venezuela han pasado a ser,
prácticamente, solo personas y hasta simples semovientes (si se me permite la
afirmación por más dura que sea), que salen día a día en busca de la
satisfacción de sus instintos más básicos: sobrevivir, no morir, adquirir algún
ingreso y con ello los medicamentos que con mucho esfuerzo se puedan encontrar,
adquirir la comida que se pueda encontrar o alcance comprar para alimentarse y,
en muchos casos, personas que ruegan y, hasta suplican, a las circunstancias,
no morir en un Hospital o en una casa, porque, ya, en muchos casos, resulta
hasta utópico llegar al Hospital y, mucho más, a una clínica. La realidad se
impone con su cruda fuerza hasta aniquilar física y mentalmente a la persona destruyendo
cualquier posibilidad para que los principios y valores ciudadanos rijan su accionar:
se impone la supervivencia por encima de todo, queda a un lado todo lo demás,
incluso, los derechos y deberes ciudadanos que nacen de los valores y principios
ciudadanos y de la dignidad humana. Principios y valores ciudadanos, derechos y
deberes ciudadanos pasan a ser algo etéreo para muchos, incomprensibles y hasta
inservibles, muy lamentablemente: no dan de comer, ni curan una enfermedad. Reitero:
la gran mayoría de las personas en Venezuela solo sobreviven.
Frente a ese duro panorama, no podemos afirmar que no existan Ciudadanos
en Venezuela, por el contrario, todavía a quienes, aunque seamos, por mucho,
los menos, pese a las circunstancias, nos resistimos a renunciar a ser Ciudadanos
y a abandonar Venezuela. Como siempre digo: Rendirse nunca, Retroceder jamás.
Sin embargo, la Ciudadanía no sólo se vive e internaliza con base en la
concientización en nuestro fuero interno, de los principios y valores ciudadanos,
de nuestros derechos y deberes ciudadanos, sino también, como aspecto
fundamental; con base en la identidad e identificación y el vínculo con la
nacionalidad, con nuestra Nación, con nuestra Venezuela. Aquí un apartado
necesario: muchos de los pocos Ciudadanos que nos quedan están perdiendo ese
vínculo y ya no se hallan, no se ven o no encuentran en Venezuela. Estudian y
trabajan con mucha constancia y esfuerzo con un solo propósito y esperanza:
irse del país y, en la mayoría de los casos, no volver más, pero no podemos
cuestionarlos, esa es una decisión que parte del ejercicio de su libertad y hay
que aceptarlo y respetarlo. Este es el punto en que debemos comprender en que
la Ciudadanía implica por concepto, el vínculo que por nuestra nacionalidad nos
identifica y nos da la identidad con la Nación pero, ya muchos Ciudadanos
venezolanos no se encuentran identificados con Venezuela, ya no sienten esa
identidad. Esa es otra cruda realidad que debemos aceptar y asumir.
Sin restar importancia a las palabras de Uslar, volvimos de la frase “sembrar
el petróleo” en el sino de la sociedad y política Venezolana y en la histórica
deuda a la que le atribuimos muchos de nuestros males. Tal vez nunca
comprendimos que la clave para construir la gran Nación que todos deseábamos
ver en Venezuela, pasaba por sembrar los principios y valores ciudadanos, los
derechos y deberes ciudadanos y en reforzar el vínculo de nuestros
connacionales con la nacionalidad venezolana, con Venezuela, no simplemente en “sembrar
el petróleo”.
Nunca es tarde para comenzar a hacerlo, más en las circunstancias
actuales, pero debemos comenzar desde el núcleo fundamental de la sociedad: la familia,
la escuela, la comunidad hasta abarcar nuestra sociedad en general y, debemos
hacerlo, como lo demuestran los estudios más avanzados: desde las edades más
tempranas y desde la educación: desde el preescolar, la primaria en primera y
segunda etapa y, por supuesto, en el bachillerato, en los niveles técnicos
superiores y en la Universidad. Debe ser un proyecto que transversalice TODOS
los niveles educativos y TODOS los niveles de nuestra sociedad.
En la Venezuela de hoy los Ciudadanos son un bien escaso, en la
Venezuela del futuro no lo sabemos, no soy optimista al respecto pero no me
daré por vencido en poner cada grano de arena que pueda, para la construcción
de ciudadanía. Lo que sí podemos afirmar es que una sociedad sin Ciudadanos
estará condenada a vivir en manos de tiranía, bajo la sumisión y la dominación
total.
josevicenteharo@gmail.com
Como la invasión Castro Chavista nos marginalizó el país!!
ResponderEliminarTotalmente cierto Dr.
ResponderEliminartotalmente cierto muy cierto
ResponderEliminarel metodo cubano....pueblo preocupado por comida...por lo basico... no se ocupa de sus derechos ciudadanos...
ResponderEliminarel metodo cubano....pueblo preocupado por comida...por lo basico... no se ocupa de sus derechos ciudadanos...
ResponderEliminar